La triste despedida al reconocido dirigente gremial Juan Arroyo

El Secretario General de ATE Juan Arroyo falleció a los 65 años de edad luego de varias semanas de lucha contra el Covid-19.

Su desaparición física generó innumerables mensajes de reconocimiento a su trayectoria como dirigente gremial en las redes sociales de Capital y del interior provincial.

El "Puma Arroyo" como le decían afectuosamente sus compañeros de lucha seguirá siempre presente en las personas que valoraron su presencia en los conflictos más complejos de la provincia.

Sin dudas, es un año de pérdidas irreparables para muchas familias y sectores de nuestra comunidad. 

Diferentes organizaciones lamentaron su repentina partida y acompañaron sus minutos finales con mensajes y oraciones. Calificado como un gran luchador, el Secretario General de ATE, Juan Arroyo, recibió una cálida despedida con aplausos y palabras de gratitud frente a la sede institucional de ATE.

Juan Arroyo fue considerado como uno de los pocos representantes de los trabajadores que realmente ha dedicado su vida a la lucha gremial, que salió a la calle para expresarse tanto en Capital como en el interior, revalorizando la tarea de cada persona a la que defendía en diferentes conflictos.

Juan Francisco Arroyo habló siempre con orgullo de la gran familia de ATE, porque según  su visión como gremialista, "no solamente defendía los intereses de los trabajadores sino el bienestar de cada familia".

La Asociación de Trabajadores del Estado perdió a un gran dirigente y ha dispuesto el cierre por luto durante los próximos 3 días hábiles.

Palabras de sus compañeros de lucha

"Querido Puma, compañero, nos enseñaste a luchar por los derechos de aquellos que no tienen voz. Por los trabajadores en su conjunto, sin  distinción  de espacio laboral, donde todos somos iguales, donde todos llevamos la misma la misma camiseta, ser laburantes  sea cual sea el sector al que pertenezcamos".

"Con un concepto de unidad que pocos utilizan en el mundo del sindicalismo y que es la unión de las fuerzas y hasta a veces de renunciamiento para proteger la fuente de trabajo de otros compañeros y sus familias. Nos enseñaste a amar nuestra ATE, nuestra institución y a defenderla como tal". 

"Hoy esta pandemia nos deja sin tu presencia física, pero no permitiremos que ingrese a nuestros corazones a nuestras mentes y se lleve tu legado, el cual tomaremos como guía, para ser y seguir siendo orgullo como Sindicato de lucha, no de entrega. Tu muerte no tiene que ser en vano lo diste todo, nos enseñaste a dar todo y a permanecer unidos, para resistir el paso de cualquier gobierno".

Fuente: Desafío Noticias.